El Principado y el Ayuntamiento encubren la contaminación de Gijón

La Coordinadora Ecoloxista  ha solicitado información al Principado de Asturias y al Ayuntamiento de Gijón por las razones de que no avisaron a la población de los  riesgos de la nube toxica que se produjo el pasado miércoles 16 de enero coincidiendo con el arranque del horno alto de Arcelor en la factoría Veriña, contaminación de la que se ha tenido conocimiento por la reclamaciones de daños a la chapa de los vehículos.

Hay que recordar que las emisiones  y las inmisiones están monitorizadas en continuo, tanto el Principado como el Ayuntamiento tienen estaciones de control que marcaron el aumento de contaminación por partículas de forma muy significativa ese día, por lo que podrían haber advertido de los riesgos   suponía para la población las partículas corrosivas que les daban las  estaciones de controles.

Es evidente que si son apreciables los daños importantes a metales en un radio de varios kilómetros,  resulta evidente que también los habrán producido al sistema respiratorio a numerosas personas, de forma mas grave a las personas que ya  tienen problemas respiratorios importantes en ese mismo radio de acción, vecinos de Tremañes, Calzada, Montevil, Porceyo, Pumarin, etc.

En la estación de Argentina se tuvo de media las pocas horas que estuvo operativa el medidor de partículas el día 16 un valor medio anual para PM10[1] de 107 µg/m³, por encima de los de los 40µg/m³ de valor límite anual de protección a la salud y a gran distancia de los 20 µg/m³ recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo cual da idea de la gravedad del problema de ese día. Triplicando los valores medios de la estación de semana anterior, a pesar de ello el Principado persiste en decir que no se detectaron valores anormales en las estaciones.

Hay que recordar que la Coordinadora Ecoloxista ha denunciado en reiteradas ocasiones la importante contaminación atmosférica, de las aguas y del suelo producido en esta factoría con la complicidad de las diferentes administraciones responsables.

            La contaminación en partículas PM10 está asociada a la aparición y el agravamiento de múltiples patologías. Según la Organización Mundial de la Salud la exposición crónica a las partículas aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias, así como de cáncer de pulmón[2]. Asimismo esta organización afirma que la mortalidad en ciudades con niveles elevados de contaminación supera entre un 15% y un 20% la registrada en ciudades limpias[3], de ahí los beneficios de toda índole, incluidos los económicos, que se producen con la inclusión de políticas reductoras de la contaminación.

            La OMS estableció en 2005 unos valores límite para partículas PM10, aún más restrictivos que los vigentes en la Unión Europea, en sus Guías de Calidad del Aire[4]. Así mientras España considera un valor límite promedio anual de 40 µg/m³ la OMS lo establece en 20 µg/m³. Queremos terminar con una consideración que se realiza en estas Guías, donde se afirma que “los valores guía proporcionados aquí no pueden proteger plenamente la salud humana, porque en las investigaciones (científicas) no se han identificado los umbrales por debajo de los cuales no se producen efectos adversos (para la salud)”.

De ahí la importancia de que de una vez nuestras Administraciones se pongan manos a la obra como mantener criterios de prevención contra la contaminación atmosférica y que sean transparentes, que no lo son como resulta evidente en este episodio ocultado a la ciudadanía.

Coordinadora Ecoloxista d’Asturies

Para más información, tfnos.   629892624 Fruti

---

[1] La Coordinadora Ecoloxista aplica el factor de corrección de 1,2 a las partículas PM10, tal como exigió el Ministerio de Medio Ambiente según estudio realizado por el Instituto Carlos III y de acuerdo a las conclusiones del Grupo de Trabajo de la Comisión Europea sobre partículas atmosféricas en suspensión, al cambiar de medir materia sedimentable a partículas con los mismos equipos. El Principado no aplica este factor desde el año 2006, de manera intencionada para reducir los valores que indican las estaciones de control

[2] Organización Mundial de la Salud: Calidad de aire y salud. Nota descriptiva nº 313. Septiembre de 2011.

[3] Ibídem.

[4] Organización Mundial de la Salud: Guías de calidad del aire de la OMS relativas al material particulado, el ozono, el dióxido de nitrógeno y el dióxido de azufre. Actualización mundial 2005.